miércoles, 26 de mayo de 2010

Roma


La arquitectura de la Antigua Roma es uno de los testimonios más significativos de la civilización romana. Se caracteriza por lo grandioso de las edificaciones, y su solidez que ha permitido que muchas de ellas perduren hasta nuestros días. La organización del Imperio romano normalizó las técnicas constructivas de forma que se pueden ver construcciones muy semejantes a miles de kilómetros unas de otras.

La arquitectura romana tiene su origen en la etrusca, sumada a influjos de la griega, sobre todo después de las guerras púnicas (146 a. C.) y por lo tanto, presenta rasgos de ambas. Hoy se hace datar la arquitectura romana de la fecha en que se construyeron la primera vía (Vía Appia) y el primer acueducto (Aqua Appia), año 312 a. C. Por esta época y durante las conquistas de Roma en Sicilia y en la misma Grecia, los generales romanos solían llevarse como trofeo de sus victorias gran cantidad de objetos artísticos. Por otro lado, los artistas griegos y etruscos, atraídos por el poder económico de la señora del Mediterráneo, llevaron a Roma el gusto e incluso la pasión por las Bellas Artes y en estas escuelas formaron sus artistas propios.

El periodo de esplendor del arte romano abarca los dos primeros siglos del Imperio. Pero ya a principios del siglo II de nuestra era, desde el tiempo de Adriano (año 117), se inicia la decadencia del buen gusto que se acentúa en el siglo III y se confirma en el siglo IV por efecto de cierto barroquismo o irregularidad y pesadez en los estilos aunque aumente el fasto y la magnitud de las obras. Pero la arquitectura, en cuanto arte de construir sigue desarrollándose hasta la invasión de los bárbaros, por lo menos, en los principales centros de cultura. Pruebas de esto son las grandes basílicas de Roma construidas en el siglo IV, no sólo las destinadas al culto cristiano, sino también las civiles. Los restos de la colosal basílica civil de Constantino (también llamada de Majencio) que todavía se alzan en Roma, sirvieron como fuente de inspiración a los arquitectos del renacimiento en el siglo XVI. La arquitectura de la Antigua Roma es uno de los testimonios más significativos de la civilización romana.

Ordenes de la arquitectura Griega


Los griegos fueron quienes desarrollaron en mayor medida la función ornamental de la columna, elemento arquitectónico ya existente con anterioridad. Fueron ellos quienes fijaron unas normas o cánones de composición arquitectónica en tres estilos (u órdenes clásicos): dórico, jónico y corintio, aunque los dos primeros son los principales. Durante el período helenístico apareció el capitel compuesto. Posteriormente, los romanos asumieron esta tipología, aunque introdujeron algunas variantes.

La columna consta de basa, fuste y capitel. Sobre las columnas se asienta el entablamento, que consta de arquitrabe, friso y cornisa. Sobre las fachadas principales, formados por el tejado a dos aguas, están los frontones. Estos estilos se conocen sobre todo por los diferentes capiteles de las columnas, pero hay diferencias en la mayor parte de los elementos de diseño y decoración entre los órdenes, como la proporción alto/diámetro de la columna y las formas del entablamento.

Los propios griegos usaron los nombres de dórico y jónico, lo que reflejaba su creencia de que los estilos descendían de los griegos dorios y jónicos de la Edad Oscura, pero es improbable que esto sea cierto.

Orden dórico
El estilo dórico es el más rudo y se empleaba en exteriores, especialmente de los templos dedicados a los dioses varones.

Este estilo clásico responde a una de las dos raíces del arte griego, la doria, que está en relación con las culturas de los metales europeas.

Entre otros rasgos estilísticos, se caracteriza por un capitel de gran sencillez, formado por collarino, equino y ábaco cuadrado, así como por un friso en el que se alternan metopas y triglifos. Las columnas son esbeltas y carecen de basa. El estilo dórico era más formal y austero.

Se cree que tuvo su origen en las construcciones en madera, cuyas formas pasan a la piedra. Así, los triglifos responderían a las cabezas de las vigas transversales en las construcciones de madera.

El estilo dórico se usaba en la Grecia continental y de allí se difundió por las colonias griegas en Italia. La mayor parte de los templos que se conservan de época griega pertenecen a este estilo: el de Hera en Olimpia (600 a. C.), el de Apolo en Corinto (540 a. C.), los de Paestum (siglo VI a. C.), el de Apolo en Delfos (520-500 a. C.) y el Hefestión y los Propileos (437-432 a. C.) en Atenas. Se considera que el estilo culmina con el Partenón de Atenas (447-438 a. C.), templo octástilo y períptero. En su construcción participaron el arquitecto Ictino y su ayudante Calícrates. Destaca la decoración de sus frontones y del friso, obra de Fidias. Una explosión del año 1687 destruyó en parte este templo.

Orden jónico
El estilo jónico se empleaba en interiores o en exteriores de templos dedicados a divinidades femeninas. Resultaba elegante y refinado frente al dórico, por lo que se asociaba a con la gracia y delicadeza de lo femenino. Era más relajado y decorativo que el dórico.

Este segundo estilo clásico se relaciona con la otra raíz del arte griego, la jonia, en relación con Asia Menor. Se usó en las ciudades de Jonia (hoy costa occidental de Turquía) y algunas islas del Egeo. El orden jónico se hizo preponderante durante el período helenístico, pues es más decorativo y apropiado a la estética de este período que el más severo dórico. La documentación demuestra que la evolución del orden jónico se encontró con resistencias en muchos estados griegos, pues entendían que representaba el dominio de Atenas.

El rasgo más representativo de este estilo es el capitel con dos volutas o espirales encuadrando el equino. Del entablamento destaca el hecho de que el arquitrabe, que se muestra usualmente descompuesto en tres fajas horizontales, llamadas platabandas y que el friso sea una banda continua, sin metopas ni triglifos. Las columnas son más esbeltas y ocasionalmente son sustituidas por estatuas de muchachas llamadas cariátides, como ocurre en el Erecteión.

Al orden jónico pertenecen dos templos construidos en la Acrópolis de Atenas: el de Atenea Niké (427-424 a. C.) y el Erecteión. El Erecteión es un triple templo, con las cariátides jónicas. Algunos de los edificios helenísticos mejor conservados, como la Biblioteca de Celso, pueden verse en Turquía, en ciudades como Éfeso (templo de Artemisa) y Pérgamo. Pueden citarse los templos de Atenea Polias en Priene y el de Apolo en Dídima.

Pero en las grandes ciudades helenísticas como Alejandría en Egipto, no queda prácticamente rastro.

Orden corintio
Al igual que el estilo jónico, el corintio se empleaba en interiores o en exteriores de templos dedicados a divinidades femeninas. El estilo corintio, más ornamentado, fue un desarrollo tardío del jónico en el siglo V a. C.

Es el más ornamentado o recargado. Destaca como rasgo estilístico el capitel en forma de campana invertida o cesta, en cuya parte inferior hay una doble fila de hojas de acanto, de las cuales surgen unos caulículos o tallitos que se enroscan en las cuatro esquinas y en los centros.

Entre los templos de este orden, destaca el de Zeus Olímpico en Atenas (174 a. C.). También cabe mencionar la Linterna de Lisícrates en Atenas, monumento conmemorativo que fue encargado por el poeta Lisícrates para exponer el trofeo obtenido en un certamen de teatro.

Edificios Publicos


Entre los edificios de utilidad pública figuraban como principales después de los templos y los mencionados teatros:


Fachada de la Biblioteca de Celso, Éfeso, Turquía.Las ágoras o plazas públicas rodeadas de pórticos y obras artísticas para reuniones civiles, mercados y asambleas.
Las ciudades griegas necesitaban también al menos un bouleterión o cámara del consejo, un gran edificio público que servía como tribunal y lugar de reuniones para el consejo de la ciudad (boulé). Debido a que los griegos no usaban arcos ni bóvedas, no podían construir edificios con amplios espacios interiores. El bouleuterion por lo tanto tenía filas de columnas internas que sostenían el tejado (salas hipóstilas). No quedan ejemplos de estos edificios.
Los gimnasios y palestras o edificios para escuelas, también con patios y pórticos, donde se practicaban los ejercicios físicos y concursos atléticos. Las ciudades griegas de cierto tamaño tenían al menos una palestra o un gimnasio como centro social para los ciudadanos varones. Son espacios cerrados perípteramente, pero a cielo abierto.
Los estadios, con gradería recta a lo largo y semicircular en un extremo para carreras a pie y pugilatos. Estaba destinado a espectáculos de carácter deportivo. El estadio griego más antiguo es el que se encuentra en Olimpia. Medía 600 pies griegos, esto es, un estadio, pues la unidad de medida nació precisamente aquí. El de Atenas fue reconstruido en 1896 para la celebración de los primeros juegos olímpicos de la Edad Moderna. Quedan asimismo los de Delfos (sede desde 582 a. C. de los Juegos Píticos), Epidauro, Mileto y Pirene.
Los hipódromos, semejantes a los estadios pero con cerramiento arqueado en ambos extremos y que se destinaban a carreras de caballos y carros. Quedan pocos restos de ellos.
casas de fuentes (edificios en que las mujeres llenaban sus vasijas de agua).
La Stoa/Στωα, un espacio amplio con una columnada abierta al costado, que se usaba para el ágora (centro comercial y cívico) en las ciudades griegas. Una estoa completamente restaurada, la Stoa de Átalo, puede verse en Atenas.
Las fuentes en las que las mujeres recogían agua.

Teatro Griego


El segundo tipo de edificio griego en orden de importancia, después de los templos, son los teatros, siendo los primeros edificios en Occidente destinados a espectáculos. Cada ciudad griega contaba con uno.


Teatro griego en Epidauro.
El Teatro de Herodes Ático, Atenas.Los teatros se usaban tanto para reuniones públicas como para interpretaciones dramáticas. Estas actuaciones se originaron como ceremonias religiosas vinculadas con el culto a Dionisos; evolucionaron hasta asumir su estatus clásico como la más alta forma de cultura griega en el siglo VI a. C. (véase Teatro griego).

Se construían al aire libre, sobre una colina en las afueras de la ciudad. Las gradas tenían forma semicircular y se asentaban en la ladera de un cerro. De esta forma aprovechaban la inclinación natural del terreno, para permitir que todos los espectadores vieran el escenario sin obstáculos y sin necesidad de alzar grandes y costosas estructuras arquitectónicas. Conseguían teatros que podían acomodar hasta 15.000 espectadores, cifra que aun hoy parece muy grande (los teatros actuales más grandes tienen menos, y ni siquiera los teatros romanos llegaron a ese tamaño). A este graderío semicircular se le llama Koilan, Cávea o theatron. A partir del siglo IV a. C. se realiza en piedra.

Las gradas estaban en torno a un círculo central, llamado orquesta (orchestra). Tenía el suelo de tierra. Allí se colocaban los músicos, se bailaba y se situaba el coro que relataba la acción de la obra y actuaban mientras los actores se cambiaban e incluso junto a estos. A veces en la orquesta se colocaba la thyméle, el altar del dios Dioniso.

El escenario quedaba detrás de la orquesta, y estaba cerrado por un sencillo muro. No obstante, con el tiempo se diferenció el proscenio (proskenion) y la escena (skené), actuando los actores en el primero y dejándose la segunda para almacén, vestuario y telón de fondo. En principio estaba al mismo nivel que la orquesta y luego se elevó.

En los laterales estaban los parodos o parodoi, pasillos que separaban el auditorio de la escena.

Es en la época clásica cuando los edificios de los teatros se fueron haciendo más importantes. Se considera que el más antiguo es el de Dioniso en la falda de la Acrópolis de Atenas, pues su construcción se inició en el siglo VI a. C. No obstante, su aspecto actual se corresponde con la transformación sufrida en el siglo IV, cuando la anterior construcción rudimentaria se sustituyó por otra de piedra equiparable a los de Delfos o Epidauro.

De los teatros que sobreviven prácticamente intactos, el más conocido es el de Epidauro, erigido por Policleto el Joven alrededor del 350 a. C. Es el mejor conservado, y en él se puede apreciar un espacio circular para el coro y el graderío sin divisiones. Ya en la Antigüedad fue considerado el más bello «por su armonía y belleza» (Pausanias). Cuenta con una acústica excepcional; tiene una capacidad para 14.000 personas.

Distintos de los teatros son los odeones (odeion), de menor tamaño, y destinados a recitales musicales. Tenían planta cuadrangular, con varias hileras de columnas soportando la cubierta, y varios pórticos. Entre los que quedan está el odeón construido cerca del teatro de Dioniso en la Acrópolis.

Mito


La palabra "mito" deriva del griego mythos, que signfica "palabra" o "historia". Un mito, tendrá un significado diferente para el creyente, para el antropólogo, o para el filólogo. Esa es precisamente una de las funciones del mito: consagrar la ambigüedad y la contradicción. Un mito no tiene por qué transmitir un mensaje único, claro y coherente.

Falso arco

Arco construido colocando a ambos lados de un vano, bloques de piedra escalonados de manera uniforme hasta encontrarse en un punto intermedio. También llamado arco falso

Estructura y estilo de los tempolos Griegios


Son construcciones arquitrabadas que se alzan sobre una plataforma con gradas (krepis o krepidoma), llamándose estilóbato al último escalón. La planta definitiva del templo griego constaba de un local llamado cella,[6] un espacio interior, de forma rectangular, que constituye el núcleo de la construcción. Tiene una sola abertura, la puerta, sin ventanas. A veces el templo tiene dos cellas, con las puertas en las fachadas principales, las más cortas, y en este caso cada cella suele estar dedicada a una divinidad distinta.

Delante de la cella estaba la pronaos o pórtico de columnas.

Al templo así configurado se le fueron añadiendo columnas delante, detrás o incluso rodeándolo por todos lados. Según cómo se coloquen las columnas, el templo se llama de distinto modo: in antis, el que prolonga los muros laterales de la cella hacia la fachada, cerrando el vestíbulo por los lados. Templo próstilo es el que tenía, además de las dos columnas conjuntas, otras dos enfrente de las pilastras angulares con lo que, en definitiva, presentaba cuatro columnas en la fachada principal; se le considera el de segunda especie entre los antiguos. Anfipróstilo es el edificio con pórtico y columnas en dos de sus fachadas, es decir, en la de delante y la de detrás; un ejemplo es el pequeño templo de Atenea Niké. Se dice períptero del templo clásico rodeado por columnas que deja paso entre estas y el muro, es decir, aquel con columnas en todo el perímetro; un ejemplo de templo períptero es el Partenón. Por último, díptero se llama al templo al que rodea una doble fila de columnas.

Tenían siempre en las fachadas principales (las más cortas) un número de columnas par, y dependiendo del número de columnas se llaman de distinta manera: cuando tiene cuatro, tetrástilo; si son seis, hexástilo; si son ocho, octóstilo; si fueran diez, decástilo y con doce, dodecástilo. De este modo, se marca el eje con un hueco. Las columnas de los lados, sin embargo, eran impares, habitualmente el doble que en las principales más una.

Se pueden encontrar, además, otras denominaciones en referencia a los templos griegos: hipetro quería decir sin techo; pseudoperíptero se llamaba al que tenía columnas adosadas en los lados; y áptero, al templo sin columnas.

Historia de Grecia


La mayor parte del conocimiento actual de la arquitectura griega proviene del período arcaico tardío (550 - 500 a. C.), la época de Pericles (450 - 430 a. C.), y el periodo puramente clásico (430 - 400 a. C.). Los ejemplos griegos son considerados junto a los períodos helenístico y romano (puesto que la arquitectura romana copió en gran medida a la griega), y fuentes escritas tardías tales como Vitrubio (siglo I). Como resultado, queda una fuerte tendencia hacia los templos, los únicos edificios que sobreviven en un número significativo.

Período arcaico
Es la primera etapa. Tiene varias fases. Comienza a principios del primer milenario antes de Cristo y se cierra en el primer tercio del siglo V.

La arquitectura, definida como edificaciones ejecutadas según un diseño estético consciente, desapareció de Grecia desde finales del periodo micénico (alrededor de 1200 a. C.) hasta el siglo VII a. C., cuando la vida urbana y la prosperidad se recobraron hasta el punto de poder emprenderse la edificación pública. Pero a partir de entonces muchos edificios griegos durante el periodo de las colonizaciones (siglos VIII - VI a. C.), se hacían de madera o adobe o arcilla, nada queda de ellos excepto unos pocos planos sobre el terreno, y casi ninguna fuente escrita sobre esta arquitectura temprana o descripciones de estos primeros edificios.

Alrededor del año 600 a. C., las columnas de madera del antiguo Hereo de Olimpia sufrieron una transformación material, conocida como «petrificación», en la que fueron reemplazadas por columnas de piedra. Poco a poco, otras partes del templo fueron petrificadas hasta que todo él estuvo hecho de piedra. Con la expansión de este proceso a otros santuarios, los templos griegos y edificios significativos desde el siglo VI a. C. en adelante, fueron construido en gran parte con piedra, y unos pocos ejemplos afortunados han sobrevivido a lo largo de los siglos. La introducción de paredes de piedra también permitieron que los tejados con techo de paja fueran reemplazados por tejas que actuaron como medio para mejorar la resistencia ante el fuego.

En esta época se usaba el orden dórico, incluso el jónico.

Ejemplo de la etapa de transición entre el período arcaico y el clásico es el templo de Poseidón, en Paestum, de planta rectangular, períptero y hexástilo.

Período clásico
Es la segunda etapa, que se corresponde con los siglos V y IV a. C.

Como la pintura y la escultura de la época, la arquitectura griega de la primera mitad de la Antigüedad clásica no era «arte por el arte» en el sentido moderno. El arquitecto era un artesano empleado por el estado o por un rico cliente privado. No se distinguía entre el arquitecto y el constructor. El arquitecto diseñaba el edificio, contrataba a los obreros y artesanos que lo construían, y era responsable tanto de su presupuesto como de su acabado a tiempo. No disfrutaba del estatus noble que tienen los modernos arquitectos de edificios públicos. Incluso los nombres de los arquitectos son desconocidos antes del siglo V a. C. Un arquitecto como Ictino, que diseñó el Partenón, que hoy en día sería considerado un genio, era tratado en vida tan sólo como un comerciante experto y muy valioso.

Supone el apogeo de los órdenes dórico y jónico.

Período helenístico
Es la tercera y última etapa del arte griego. Se extiende desde el siglo III a. C. hasta mediados del siglo II a. C., tomándose como fecha simbólica de cierre el año 146 a. C., cuando la ciudad de Corinto es conquistada por los romanos.

El peso del desarrollo artístico se trasladó hacia Oriente. En esta época se desarrollaron grandes construcciones en Pérgamo (Altar de Zeus), Rodas y Alejandría. De esta época es el Mausoleo de Halicarnaso.

Lo más destacado son los proyectos urbanísticos como los de Hipodamo de Mileto, con organizaciones en cuadrículas, ejemplo que fue seguido en siglos posteriores.

Se abandonó el severo estilo dórico.

Grecia


La Arquitectura en la Antigua Grecia es aquella que se desarrolló en la Grecia de la antigüedad, desde el primer milenio a. C. hasta el siglo II a. C. Reviste particular importancia para la historia de toda la arquitectura occidental.

La arquitectura griega sienta las bases de lo que será la arquitectura del mundo occidental durante siglos. La codificación de la edad arcaica en tres órdenes estéticos conforme a los cuales construyeron los antiguos griegos (dórico, jónico y corintio) se convertiría con el helenismo en un lenguaje compartido por todo el mundo mediterráneo.

Materiales
Los materiales frecuentemente empleados en la arquitectura griega fueron la madera, para soportes y techos; ladrillo sin cocer para las paredes, especialmente de casas; la piedra caliza y el mármol, para columnas, muros y porciones elevadas de los templos y edificios públicos; la terracota, para ornamentos; y metales, especialmente el bronce, para detalles decorativos. Los arquitectos de la época arcaica y clásica usaron estos materiales constructivos para edificios: religiosos, cívicos, domésticos, funerarios y recreativos. El adobe se reservaba para las construcciones más pobres y sin importancia.

En cuanto a las tejas, ha de recordarse que los restos más antiguos de la Grecia arcaica están documentadas en un área muy limitada en torno a Corinto (Grecia), donde las tejas fueron sustituyendo a los techos de paja en los dos templos, de Apolo y de Poseidón entre los años 700 y 650 a. C.[1] Se expandió rápidamente, durante los cincuenta años siguientes, usándose en un elevado número de lugares alrededor del Mediterráneo oriental, incluyendo la Grecia continental, el oeste de Asia Menor, y el sur y el centro de Italia.[2] Las primeras tejas tuvieron forma de S, y eran bastante abultadas, con un peso de unos 30 kilos cada una.[3] Resultaban más caras y costosas de producir que un tejado de paja, por lo que su introducción se explica por la resistencia al fuego, que daba la necesaria protección a los costosos templos.[4]

La expansión de la cubierta de teja debe verse en relación con el simultáneo auge de la arquitectura monumental en la Grecia Arcaica. Sólo los muros de piedra que estaban apareciendo por entonces, reemplazando a las precedentes paredes de barro y madera, eran suficientemente fuertes para soportar el peso de una techumbre de tejas.

Finalmente, no puede olvidarse que el aspecto general de los edificios era distinto al que se ve actualmente, ya que se pintaban con colores brillantes, de rojo, de azul, de tal manera que llamaban la atención no sólo por su estructura, sino también por su policromía.

jueves, 25 de marzo de 2010

Templo de Abu Simbel


Estatuas colosales de Ramses II .Anónimo.1300-1225 a.C. XIX Dinastía. Estatuas sedentes de más de 20 m. Piedra arenisca. 38 m de ancho en la base y 63 m de profundidad. Entre el Alto Egipto y Nubia (sur del Egipto actual)

Localización. El Gran Templo de Abu-Simbel fue construido por deseo de Ramsés II (1290-1224 a.C.) excavado en los acantilados del Alto Nilo, en las cercanías de los que hoy es Sudán, aunque actualmente no está en el emplazamiento original, pues la construcción de la presa de Asúan obligó a trasladarlo unos metros más arriba, aunque conserva todos las cualidades y atributos del templo primitivo. El conjunto fue desmontado en más de mil piezas durante casí diez años de trabajos (1963-1972) para ponerlo en lugar seguro. Fue dedicado a los principales dioses egipcios (Amón, Ra, Ptah) y aun al mismo Ramsés que fue divinizado.
Análisis formal (estructura). En el exterior muestra una gran fachada de 38 m. de ancho por 33 de alto, esculpida en la roca granítica que forma el acantilado, adoptando la forma de una pilono (de forma trapezoidal, más ancho en la base que la parte superior), aunque hueco. Contiene cuatro colosales estatuas sedentes del faraón (aún estando sentadas tienen una altura superior a los 20 m. y no están exentas sino que son altorrelieves) rodeadas por otras esculturas de menor tamaño que representan a sus familiares (su mujer Nefertari, su madre y sus hijos) y numerosos relieves exaltando las victorias de Ramsés sobre sus enemigos, así como inscripciones alusivas a sus campañas contra los negros de África y los pueblos de Siria. Entre los dos colosos centrales hay una puerta y, encima de ella un nicho con la figura del titular del templo, Re-Horakhte (el dios Sol resultado de la fusión de Horus y Re), acompañado de una Maat (diosa de la justicia) de escala menor, y del cetro User, de modo que las tres figuras componían un jeroglífico: Usermare("poderosa es la justicia del sol"), el primer nombre de Ramsés, situado por tanto entre los dioses. Delante de los pedestales de los colosos se alzan estatuas de halcones y del propio rey, éste en actitud de marcha. En la parte más alta de la fachada, como tienen por costumbre hacer en la naturaleza, una fila de monos babuinos, cada uno de ellos de más de 2 metros, saluda alborozada al sol naciente.
Las características de las figuras, principalmente las de Ramsés, remiten a los principios que guían la escultura egipcia en lo que se refiere a la representación de los faraones: frontalidad, hieratismo, simetría, etc... para dar la imagen de un rey poderoso, fuerte pero sereno, joven, atemporal, divino
Su estructura es un caso único en la arquitectura egipcia: un speos, un templo rupestre, dotado de los mismos elementos que un templo normal no rupestre, salvo la inversión forzosa de sus dos primeros elementos, el pílono y el patio. El patio, escenario de los sacrificios cruentos y de las hogueras sagradas, precedía aquí al pílono, que en vez de ser un edificio exento, estaba tallado en la roca entre dos contrafuertes oblicuos. El objeto de éstos era producir el efecto de perspectiva que hiciese parecer más distante y profunda la fachada del pílono.
La puerta conduce al interior del templo, cuya disposición general sigue el modelo de las grandes construcciones religiosas de Tebas: en primer lugar se accede a una cámara, a modo de primera sala hipóstila, con pilares monolíticos en forma de figuras osíricas; desde ella se penetra en la que ha sido considerada como la sala hipóstila; al fondo una tercera cámara o santuario con estatuas de Ramsés y de los dioses Ptah, Amón y Ra. En los laterales se disponen otras salas y estancias menores a modo de capillas. La parte interior del templo produce una primera impresión desfavorable si la comparamos con el magnífico exterior. Los escultores y constructores habían previsto naturalmente que, al realizar en roca viva una obra como ésta, habían de tropezar con fisuras y otros defectos de la piedra, aparte de los accidentes que en la misma se pudieran producir. Los escultores y canteros sabían hacer frente a estas contingencias, manejando el yeso con una habilidad tal, que cuando sus restauraciones se conservan bien, son difíciles de advertir. De hecho son magníficos los relieves alusivos a la batalla de Qadesh contra los hititas
La orientación de la fachada hacia el este fue tan precisa que, en los dos días equinocciales del año (20 de octubre y de febrero) los primeros rayos del amanecer penetraban 60 metros en el interior del macizo rocoso para bañar las imágenes del santuario. El significado de esta iluminación se debe a que el 20 de octubre era el primer día de la estación de peret (germinación de las semillas) y el 20 de febrero se iniciaba la estación de shemu (recolección de la cosecha).
A continuación de este edificio, terminado hacia 1260, construyó Ramsés el de Hathor, en homenaje a su esposa Nefertari y siguiendo el mismo esquema. El pílono de la fachada está dividido por contrafuertes en rampa que flanquean un portal en saledizo. A cada lado se encuentran un coloso de Nefertari entre dos de Ramsés, seis figuras en total, todas en pie, encajadas en nichos, pero sin alcanzar la altura de las del otro templo (aquí sólo 10 metros). La sala hipóstila, cuadrada, está reforzada por seis pilares hathóricos, en los que la diosa adopta la forma del mango de un sistro. Sistros también, pero completos, fingen sostener el techo del santuario, donde la estatua de culto es la vaca Hathor protegiendo al monarca, como hacía en los templos funerarios de la XVIII Dinastía. El templo quedó sin acabar, según se echa de ver en las cámaras que flanquean a ésta.
Significado. Ramsés mandó construir este templo con una doble idea: por un lado, para ensalzar su propia figura, ya que las cuatro figuras magníficamente talladas e idénticamente iguales, son un fiel retrato del propio faraón con toda la potencia de la juventud en relación con los dioses. Por otro, la región en la que se enclava el templo, en la frontera con Nubia, país tributario de Egipto, que será una zona codiciada por sus yacimientos de oro, hasta tal punto que Ramses construirá una serie de fuertes para su control al igual que diversos templos excavados en las gargantas como símbolos de su poder y dominio sobre los levantiscos nubios. El faraón se pues hace representar en actitud majestuosa y hierática, como si vigilara el paso de todo aquél que quisiera entrar en Egipto. El arte, de nuevo, al servicio del poder.

La Gran Esfinge


La Gran Esfinge La Gran Esfinge de Guiza representa al rey con la fuerza de un león y con la inteligencia humana. Fue la primera vez que se utilizó esta estatua como guardián de la tumba real, al lado de las grandes avenidas que sirvieron para abastecer los materiales necesarios para la construcción del complejo funerario.

Durante años se pensó que representaba a Jafra (Kefrén), pero hoy se sabe, por la forma más cuadrada del rostro, que no se corresponde con él, por la ornamentación de la corona, de tipo más arcaico, y por el hecho de que su tumba se construyera dando un rodeo para evitarla, que la Gran Esfinge representa a su padre Jufu (Keops), encarnando a Ra cuando surge, pleno de fuerza y poder, por el horizonte.


Elementos:

°Parte superior Ureo, simbolo de Uadjet
°Nariz, 1380 o finales del siglo XVIII
°Representacion Kefren de 4.20m de ancho
°Nemes o tocado real
°Barba ceremonial, dignidad del Faraón
°Amenhotep II, padre de Tutmosis IV
°Cuerpo de 2om de altura, secree que estaba cubierta de color
°Estela de Tutmosis IV hecha el primer año de su reinado (1401a.C.)
°Su cuerpo ha pasado gran parte de su existencia en la arena, liberado en la antiguedad, siglos XIX Y XX

Piramide " Menkaura es divino"


Pirámide "Menkaura es divino"

Construida con gran abundancia de granito, material más caro y difícil de trabajar.

Faraón: Menkaura (Micerinos), Dinastía IV (2532-2530 a.C.)

Situación: Gizeh

Características técnicas: 102,2 x 104 de base, 6 m. de lado, 65 m. de altura y 235.183 m3 de volumen.

Piramide "Grande es Jafra"


Pirámide "Grande es Jafra"

Conserva en su cúspide el revestimiento de caliza blanca, perdido en casi todas las demás.

Faraón: Jafra (Kefren), Dinastía IV (2558-2532 a.C.)

Situación: Gizeh

Características técnicas: 215 m. de lado, 143,5 m. de altura y 2.211.096 m3 de volumen.

Piramide "El horizonte de Jufu"


Pirámide "El horizonte de Jufu"

La pirámide más grande de Egipto. Se alcanzan por primera vez las mejores proporciones arquitectónicas y geométricas.

Faraón: Jufu (Keops), Dinastía V (2589-2566 a.C.)

Situación: Gizeh

Características técnicas: 230,33 m. de lado, 146,59 m. de altura y 2.583.283 m3 de volumen.

Piramide Roja


Pirámide roja: "La pirámide reluciente"

Repite la inclinación final de la romboidal, ofreciendo un aspecto achaflanado.

Faraón: Snefru, Dinastía IV (2613-2589 a.C.)

Situación: Dahsur

Características técnicas: 220 m. de lado, 105 m. de altura y 1.694.000 m3 de volumen.

Piramide Romboidal


Pirámide romboidal: "El brillo del sur"

Su doble inclinación se debería a cambios en su construcción por el peligro de hundimiento debido a una inclinación inicial excesiva.

Faraón: Snefru, Dinastía IV (2613-2589 a.C.)

Situación: Dahsur

Características técnicas: 188 m. de lado, 105 m. de altura y 1.237.040 m3 de volumen. Inclinación de 54º 27' 44" y 43º 22'.

Piramide "Snefru perdura"


Primera pirámide de caras lisas. Sólo se conserva el núcleo escalonado.

Faraón: Snefru, Dinastía IV (2613-2583 a.C.)

Situación: Meidum

Caracteristicas técnicas: 121 x 109 m. de base, 60 m. de altura y 330.400 m3 de volumen.

Estatua de Zoser


Estatua del rey Zoser. Caliza. Altura, 200 cm. III dinastía. Procedente de Saqqara. Museo Egipcio de El Cairo.

La estatuaria real de la III dinastía está representada por la estatua del rey Zoser, descubierta in situ, en un pequeño serdab del lado norte de la pirámide escalonada.
El serdab es la cámara cerrada que contiene una estatua del difunto. A través de dos pequeños orificios que se abrían en la pared, la estatua (y la personalidad del individuo a ella incorporada) podía recibir las ofrendas de incienso y alimentos que se llevaban a la tumba. Así pues, esta obra no estaba destinada a verse completa, a diferencia de cómo la contemplamos hoy. El serdab de Zoser contiene en la actualidad un vaciado de la estatua original.

Restos de pigmentos indican que originalmente estuvo pintada con vivos colores: el rostro, las manos y los pies de color rojo, la vestidura blanca, la peluca y la barba postiza negras. El tocado que lleva sobre la peluca es listado.

La efigie del faraón se alza sobre un trono cuadrado. La mano derecha descansa replegada sobre el pecho. La izquierda, sobre el muslo, tensa y abierta, la palma boca abajo. Esta postura de la mano izquierda produce tal impresión de energía y poder, que todos los faraones del futuro la harán suya en sus estatuas. A pesar de los graves daños que ha sufrido la estatua, y de que ha perdido los ojos incrustados, el semblante, con ojos ligeramente oblicuos y amplia boca, transmite la idea de un soberano poderoso y decidido. Desde el punto de vista artístico, esta obra abre nuevos horizontes. Aun sin ignorar sus precedentes, que sin duda los tuvo, la estatua de Zoser es la primera representación de un ser humano con que el arte egipcio acierta a conmover profundamente al espectador

Piedra Rosetta


La piedra de Rosetta contiene un texto en tres tipos de escritura y su gran importancia radica en haber sido la pieza clave para comenzar a descifrar los jeroglíficos de los antiguos egipcios. Gracias a Thomas Young, Jean-François Champollion y otros estudiosos de la escritura del Antiguo Egipto, hoy puede ser considerada como una joya en la historia del lenguaje y la transcripción.

Es una estela de granito negro, con una inscripción bilingüe (griego y egipcio) de un decreto del faraón Ptolomeo V, en tres formas de escritura: jeroglífica, demótica y griego uncial (con letras mayúsculas); contiene cien renglones, los catorce primeros escritos con signos jeroglíficos, los siguientes 32 en caracteres demóticos, y los últimos 54 en griego; tiene algo más de un metro de alto, 72 cm de ancho y 27 cm de grosor; pesa 756 kg.

Esta fue descubierta el 15 de julio de 1799 por el capitán francés Pierre-François Bouchard en el pueblo egipcio del delta del Nilo denominado Rosetta (también llamada Rashid), cuando las tropas capitaneadas por Napoleón Bonaparte se encontraban guerreando contra las de Gran Bretaña en las tierras de Egipto.

La piedra iba a ser transportada a Francia por los miembros del Instituto de Egipto, pero los ejércitos ingleses, que habían desembarcado en la primavera de 1801, la confiscaron pese a las enardecidas protestas de Étienne Geoffroy Saint-Hilaire ante el general británico Hutchinson. La piedra de Rosetta se exhibe en el Museo Británico de Londres desde 1802. En el lado izquierdo lleva una inscripción con pintura blanca que dice «Captured in Egypt by the British Army in 1801» ('Capturada en Egipto por el ejército británico en 1801'), y en el derecho otra inscripción, «Presented by King George III» ('Presentada por el rey Jorge III').

Sólo una vez fue sacada la piedra del Museo Británico, en 1972, con ocasión del 150 aniversario del descifrado de los jeroglíficos, siendo expuesta en el Museo del Louvre por algunas semanas.

Hay una reproducción de la piedra Rosetta en el Distrito de Figeac (Lot), la ciudad natal de Champollion, y es obra del artista Joseph Kossuth, mide 11 x 8,5 m, es de granito negro (traído desde Zimbabwe), y en su pavimento están inscritos los textos en jeroglífico, demótico y griego. La plaza lleva el nombre de Place des écritures ('Plaza de las escrituras'). En el Museo Egipcio de El Cairo también se exhibe una copia.

Contenido:

El texto escrito en griego antiguo comienza así: «El nuevo rey, habiendo recibido el reino de su padre...». Narra una sentencia de Ptolomeo V, describiendo varios impuestos que había revocado, ordenando además que la estela se erigiese y que el decreto fuese publicado en el lenguaje de los dioses (jeroglíficos) y en la escritura de la gente (demótica).

Tradicionalmente se pensaba que el decreto escrito en la Piedra de Rosetta fue ideado en demótico por los sacerdotes de Menfis hacia el año 197 a. C. Pero los últimos estudios de expertos en demótico han comprobado que la inscripción original fue compuesta en griego y traducida posteriormente al demótico, aunque a veces poco fielmente.

Traducción de un fragmento del texto de la piedra de Rosetta :

Bajo el reinado del joven, que recibió la soberanía de su padre, señor de las insignias reales, cubierto de gloria, el instaurador del orden en Egipto, piadoso hacia los dioses, superior a sus enemigos, que ha restablecido la vida de los hombres, Señor de la Fiesta de los Treinta Años, igual que Hefaistos el Grande, un rey como el Sol, gran rey sobre el Alto y el Bajo País, descendiente de los dioses Filopáteres, a quien Hefaistos ha dado aprobación, a quien el Sol le ha dado la victoria, la imagen viva de Zeus, hijo del Sol, Ptolomeo, viviendo por siempre, amado de Ptah. En el año noveno, cuando Aetos, hijo de Aetos, era sacerdote de Alejandro y de los dioses Soteres, de los dioses Adelfas, y de los dioses Evergetes, y de los dioses Filopáteres, y del dios Epífanes Eucharistos, siendo Pyrrha, hija de Filinos, athlófora de Berenice Evergetes; siendo Aria, hija de Diógenes, canéfora de Arsínoe Filadelfo; siendo Irene, hija de Ptolomeo, sacerdotisa de Arsínoe Filopátor, en el (día) cuarto del mes Xandikos (o el 18 de Mejir de los egipcios).

Imhotep


Imhotep (en griego: Imutes, pronunciación en español: Im-jo-tep), sabio, médico, astrónomo, y el primer arquitecto conocido en la historia (aprox. 2690 - 2610 a. C.).


Imhotep (estatuilla). Brooklyn Museum, NY.Sumo sacerdote de Heliópolis, fue visir del faraón Necherjet Dyeser (Zoser), y diseñó la Pirámide escalonada de Saqqara, durante la dinastía III. El significado de la palabra «Imhotep» es «el que viene en paz»

Es el primer "científico" cuyo nombre ha llegado. No sólo era médico, también era arquitecto y astrónomo: esto indica que tenía los conocimientos de cálculo y geometría necesarios para dominar estas ciencias.

Los títulos honoríficos atribuidos a Imhotep son:

Tesorero del rey del Bajo Egipto, Primero después del rey del Alto Egipto, Administrador del Gran Palacio, Señor hereditario, Sumo sacerdote de Heliópolis, Imhotep el constructor, escultor, hacedor de vasijas de piedra... Inscripción en la base de la estatua de Dyeser (Zoser) hallada en Saqqara.
Antes de él, nadie había tenido su nombre inscrito al lado del de un faraón, y en sus títulos no se menciona el de médico, pero sí el de productor de recipientes: quizá sólo constan los que usó para la construcción.

ARQUITECTO:

Imhotep fue el arquitecto de la pirámide escalonada de Saqqara, en tiempos del rey Dyeser (2650 a. C.).[2] La pirámide necesitó la extracción, transporte y montaje de miles de toneladas de piedra caliza, desafío notable ya que nunca se había utilizado en grandes construcciones, para las que se usaban ladrillos de adobe, fáciles de hacer y baratos.

Un gran problema técnico era el peso de la piedra: Imhotep lo solucionó en parte usando bloques relativamente pequeños, más fáciles de transportar y manejar. Por otra parte, las columnas son de adorno o están adosadas a los muros, sin sustentar mucho peso. Es necesario tener en cuenta que en esta época el único metal conocido era el cobre, poco adecuado como herramienta para estos trabajos.

Tuvo que organizar todo el proceso de construcción, controlar el trabajo de cientos de obreros, y realizar la primera ciudad funeraria: rodeada por una muralla de unos mil quinientos metros de perímetro, construyó diversas edificaciones, como decorado, y hacia el centro erigió una pirámide de seis gradas con una altura de sesenta metros. A su vez, excavó en la roca del terreno, bajo la pirámide, la que sería la tumba de Dyeser (Zoser) y un conjunto de galerías para almacenar miles de vasijas funerarias, muchas grabadas con los nombres de sus predecesores.

Como dios:

Durante siglos, los egipcios consideraron a Imhotep como el dios de la medicina y la sabiduría y se le representa sentado, como a los escribas, con un papiro desplegado sobre sus rodillas, tocado con un casquete.

En el Imperio Nuevo fue venerado como patrón de los escribas y deificado en el periodo tardío de Egipto, para lo cual fue identificado con Nefertum, hijo de Ptah y Nut (o Sejmet). Posteriormente se le vinculó al dios Thot –una práctica común en el Antiguo Egipto.

Su culto principal estaba en Menfis. También fue venerado en Tebas, File y Deir el-Medina en la época ptolemaica junto a Hathor, Maat, y Amenhotep (hijo de Hapu), otro arquitecto deificado. Su prestigio era tan grande, que su fama llegó hasta los griegos, que lo conocían como Imutes y le asimilaron a su dios Asclepio, el Esculapio romano.

lunes, 22 de marzo de 2010

Egipto


En medio del desierto surgió una de las civilizaciones más espléndidas de la historia. Logró sobrevivir durante 30 siglos que dieron como fruto su escritura, calendario, la medicina y maravillosas obras arquitectónicas que hoy continúan desafiando el inexorable rigor del tiempo. Y también bellísimos testimonios artísticos, las momias, los reyes-dioses, entre otras.

Su inmenso legado asombra a Occidente, no en vano los faraones Tutankamón y Ramsés captan el mayor número de visitantes a las grandes exposiones organizadas en Francia durante los últimos 25 años; muy por encima de Picasso y Dalí; muchos más que Renoir, Manet, Gauguin y todos los impresionistas juntos.

Los egipcios fueron un pueblo que no solo florecieron intelectualmente, sino que también se adelantaron a muchas cosas que conocemos hoy en día como el arte, conocimientos acerca del cultivo, creencias astronómicas, etc.

Los egipcios lograron hacer de su cultura un imperio casi impenetrable, claro que esto no fue de la noche a la mañana, sino que fue, como hemos dicho durante muchos años, quizá siglos, recopilando y adoptando aspectos, datos y cosas de otras culturas.

Sin duda este es un trabajo fascinante, que gustará a todo aquél que lo lea, ya que es una recopilación de varias fuentes bibliográficas, respetando de cada una sus fechas respectivas.

Historia

Orígenes

Los egipcios fueron un pueblo conservador por excelencia, lo que puede también explicar la fase relativamente atrasada en que se detuvo su religión; además de aceptar divinidades de otras razas, con las que entraron en relaciones hostiles o amistosas, conservaron con celoso cuidado las de las diversas religiones del país.

A los antiguos les atribuyó un origen africano creyendo que venían del Alto Nilo. Se sabe que hoy Etiopía, lejos de colonizar Egipto, fue colonizada por él, y que el pueblo egipcio desciende del grupo hamita de raza blanca, cuyas tribus poblaron Africa del Norte.

Cabe agregar que los egipcios estuvieron en un tiempo bajo dominio de los hicsos (grupo asiático) hasta que los gobernadores tebanos del Alto Egipto lograron derrotarlos y expulsarlos (1580 a. C). Se inició entonces un período conocido como Nuevo Imperio, caracterizado por las conquistas militares de Egipto. Posteriormente, Egipto fue conquistada por otros pueblos.

Los egipcios fueron los más notables representantes de la raza camita, una raza africana que constituyó el núcleo de los primeros pueblos mediterráneos, y a la que se le suele asignar la mayor parte de las estirpes y lenguas que no pertenecen a las 2 grandes familias : la indoeuropea y la semita. Camita son, el copto, derivado directamente del egipcio el grupo de lenguas berberiscas, que todavía se habla en el Africa Septentrional, y la raza "kushita" que comprende, entre otros, el somalí, el gala y el dankali; al tronco camita parece corresponder, además, pueblos como los egeos de la civilización minoica de Creta; los vascos de España, los drávidas de la India, y algunas razas de la Polinesia.

En cuanto a los egipcios, en siglos pasados se les propuso originarios de una región llamada Punt, situada probablemente a lo largo de la costa Somalí. Estos antiquísimos Punistas procedentes del sur africano y convertidos en indígenas de las orillas del Nilo, habrían sido después sometidos por invasores septentrionales, portadores de una civilización más elevada que produjo el nacimiento de las dinastías.

En el curso del río se basa la posterior subdivisión del país en Alto Egipto (Tebaida), Medio Egipto (Heptanomida) y Bajo Egipto (Delta) con esta división se corresponden los tres grandes períodos históricos : Memfita, Tebano y Saíta, entre los cuales se distribuyen treinta y tres dinastías de faraones.

Sin el Nilo, todo el territorio egipcio sería un desierto árido e inculto. Es este río el que trae de lejanas regiones, en las que las precipitaciones son muy copiosas, el agua que permite junto a sus riberas los cultivos y la vida. Estas aguas a veces se desbordan originando las periódicas crecidas que obligan a los campesinos a un largo lapso de inactividad aunque aveces resultan insuficientes, sobre todo en las tierras distantes del curso del río.

Las pérdidas sufridas en la zona pantanosa y la carencia de afluentes en esta región árida comprometería quizá la existencia misma del río en el larguísimo recorrido medio e inferior, y el Nilo se agotaría a través de los miles de kilómetros de desierto que se interpone antes de alcanzar el mar.

El régimen hidrográfico del río Nilo se caracteriza por 2 crecidas anuales que se producen en verano de modo poco regular, por lo menos en su curso medio y bajo. El nivel del río comienza a subir en junio y alcanza su máximo en septiembre, para descender después gradualmente, hasta alcanzar su nivel más bajo entre febrero y junio. Las crecidas del Nilo se deben a la abundante aporte de sus 2 afluentes de la derecha, el Nilo Azul y el Atbara. En la crecida estival máxima del Nilo, ésta procede aproximadamente en un 80% del Nilo Azul, en un 15% del Atbara y sólo en un 5% del Nilo Blanco. El aporte invernal aveces es debido en gran parte al Nilo Blanco. Por ello, la prosperidad de Egipto depende de la crecida anual del Nilo que, al inundar una prolongada faja a lo largo de sus orillas las riega y fertiliza, depositando sobre ellas una sutil capa de limo.

El clima de Egipto es de tipo desértico mitigado únicamente el la costa mediterránea. Se caracteriza por la extrema escasez o incluso la falta absoluta de lluvias, por un cielo sereno durante largos espacios de tiempo, por temperaturas elevadas todo el año.

Durante varios siglos, el Alto Egipto afirma su unidad frente a la rebeldía del Delta, que se ha desarrollado completamente como una sociedad agrícola con artesanías y ciudades. El Alto Egipto mantiene su personalidad frente a los nubios del sur, los libios del oeste y los beduinos del desierto del este y de la península del Sinaí.

Se citan 3 reyes, llamados Escorpión, Narmer y Horus, como los unificadores de Egipto.

Egipto aparece precisamente como el "Reino de los 2 países" El Alto y el Bajo y su rey es una divinidad. Esta vive en el rey como en la imagen o en el animal sagrado; al morir el rey pasa a su sucesor. El rey es la encarnación de Horus, y tal concepción reposa en ideas bien vivas sobre la función religiosa del jefe de la horda primitiva. En las 2 coronas, la blanca y en forma de alto gorro o tiara del Alto Egipto y la roja baja gorra del Bajo, se resume la hazaña cultural de la unificación del país y la creación de una entidad de importancia política antes nunca conocida.

De las 5 dinastías que la ciencia moderna asigna al primer periodo de la historia egipcia, o sea, el llamado Imperio Antiguo, que durante las 2 primeras dinastías "tanitas" tuvo la capital en Tanis, y de la tercera en adelante, en Menfis, solamente la cuarta comienza a alcanzar relieve gracias a la "Piedra de Palermo", que nos revela algunas particularidades acerca del reinado de su fundador y gracias también a las 3 grandes pirámides erigidas en Gizeh.

Con la misma dinastía, comenzó un período intermedio de trastornos internos que duro hasta la XI dinastía; en la actualidad al Imperio Medio se le asigna solamente las dinastías XI y XII. Siguió un segundo período intermedio que coincide con la presencia en el Delta de los hycsos, semitas invasores; después comienza la triunfante ascensión del Imperio Nuevo. En el último período, de decadencia y trastornos, el centro de la vida social, oficial y cultura se traslado hacia el Bajo Egipto; fueron capitales alternativamente, Tanis, Sais, Mendes, Sebenytos. A una dinastía de reyes sacerdotes y a 2 dinastías libias, siguió una etíope; después una nacional, que señaló un renacimiento espiritual y literario; tras el paréntesis que significo la dominación persa, reinaron en menos de un siglo las 3 últimas dinastías de faraones. La conquista por parte de Alejandro Magno, la dinastía de los Ptolomeos, la ocupación romana, la invasión árabe, son los principales hechos políticos que llevaron al gradual debilitamiento y extinción de todo lo egipcio.

jueves, 18 de febrero de 2010

Alvar Aalto.



Hugo Alvar Henrik Aalto (Kuortane, 3 de febrero de 1898 - Helsinki, 11 de mayo de 1976) fue un arquitecto y diseñador de muebles finlandés.
Estudió arquitectura en lo que ahora es la Universidad Politécnica de Helsinki. Después de graduarse en 1921 realizó un dilatado viaje de estudios por Europa. En 1923 abrió su propio despacho de arquitectura en una ciudad pequeña, el cual trasladó en dos ocasiones, la segunda a Helsinki. En 1925 contrajo matrimonio con Aino Marsio, quien fue su colaboradora. En 1928 fue nombrado miembro del Congreso Internacional de Arquitectura Moderna. Más adelante se trasladó a los Estados Unidos, donde fue profesor de arquitectura en el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts, el MIT por sus siglas en inglés, en Boston.
Las obras de Aalto se integran con armonía en el paisaje, formando con éste un conjunto arquitectónico. La madera y el ladrillo fueron sus materiales preferidos. Seguidor convencido del funcionalismo y de la arquitectura orgánica, fue uno de los primeros y más influyentes arquitectos del Movimiento Moderno escandinavo. A lo largo de su carrera, Aalto diseñó 200 proyectos, de los que se realizaron la mitad. Además de arquitecto, Aalto fue también diseñador y creó los muebles para la mayoría de sus edificios. En 1935 fue, junto con su esposa, co-fundador de la empresa de muebles Artek. Allí diseñó la primera silla apoyada en una estructura de madera autoportante, que fue patentada. Una de sus piezas clásicas es el jarrón Aalto, también llamado Savoy.

Templo de Karnak!!


El nombre actual de este enorme e impresionante complejo templario proviene de una aldea cercana llanada el-Karnak, pero su nombre originario fue Ipet-Isut "El más selecto de los lugares" o" El lugar más venerado"

Este fabuloso complejo templario albergaba, no solo,la sede del gran dios Amón, sino que, además constituía también el emplazamiento de numerosas capillas y templos dedicados a otros dioses. Por ejemplo: en el recinto se encuentran tres complejos principales: en el centro se halla el de Amón, con sus capillas auxiliares; en el sur el de su esposa, la diosa Mut y hacia el norte el recitnto de Montu. El pequeño templo de Jonsu dios que formaba parte de la tríada tebana, se encuentra dentro del recinto principal de Amón

También conocido como el complejo de Karnak , es un vasto conglomerado de templos, capillas y otras construcciones que ocupan una extensión aproximada de 1,5 km de largo.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Arquitectura etimología:


«Arquitectura» proviene del griego «αρχ» (arch), cuyo significado es «jefe\a, quien tiene el mando», y de «τεκτων»(tekton), es decir «constructor o carpintero». Así, para los antiguos griegos el arquitecto es el jefe o el director de la construcción y la arquitectura es la técnica o el arte de quien realiza el proyecto y dirige la construcción de los edificios y estructuras, ya que, para los antiguos griegos, la palabra «Τεχνη (techne)» significa saber hacer alguna cosa. De ella proceden las palabras "Técnica" y también "Tectónico" (Constructivo). En su sentido más amplio, William Morris dio la siguiente definición:

La arquitectura abarca la consideración de todo el ambiente físico que rodea la vida humana : no podemos sustraernos a ella mientras formemos parte de la civilización, porque la arquitectura es el conjunto de modificaciones y alteraciones introducidas en la superficie terrestre con objeto de satisfacer las necesidades humanas, exceptuando sólo el puro desierto.» (The Prospects of architecture in Civilization, conferencia pronunciada en la London Institution el 10 de marzo de 1881 y recopilada en el libro On Art and Socialism, Londres, 1947.)
Tomando en cuenta la opinión del arquitecto Bruno Zevi:

La arquitectura no deriva de una suma de longitudes, anchuras y alturas de los elementos constructivos que envuelven el espacio, sino dimana propiamente del vacío, del espacio envuelto,del espacio interior, en el cual los hombres viven y se mueven.» (Saber ver la arquitectura, Barcelona, 1948.)

lunes, 8 de febrero de 2010

Malinchismo.

La palabra malinchismo, es un término de la cultura popular mexicana y guatemalteca que se utiliza para caracterizar una conducta frente a lo extranjero:

Malinchismo es la preferencia de lo extranjero frente a lo nacional.
Malinchismo es un deseo de sentirse extranjero antes que habitante de su pais originario
Malinchismo significa traición a lo propio en favor de lo foráneo.
El término tiene su origen en La Malinche, una mujer que acompañó a Hernán Cortés y a quién ayudó como guía e intérprete. Gracias a la ayuda de esta mujer, los conquistadores fueron capaces de establecer alianzas y pactos para obtener la ayuda de otros pueblos en contra de los mexicas.

Conjunto Urbano Nonoalco Tlatelolco.


El Conjunto Urbano Nonoalco Tlatelolco o conocido simplemente como Tlatelolco, es un conjunto habitacional ubicado al norte de la Ciudad de México.

Mario Pani Darqui (n. México, D. F.; 29 de marzo de 1911 - México, D. F.; 23 de febrero de 1993) fue un arquitecto y urbanista mexicano. Gran promotor de las ideas de Le Corbusier en México. Su legado abarca 136 proyectos en los que abordó todas las tipologías: viviendas, escuelas, edificios públicos, hospitales, hoteles, oficinas, edificios comerciales, aeropuertos, planes urbanos.

Dicha unidad se encuentra dentro de la Delegación Cuauhtémoc y se encuentra delimitada por las siguientes colonias y avenidas:

Al Norte por las colonias San Simón Tolnahuac y Ex-Hipódromo de Peralvillo en el Eje 2 norte Manuel González;
Al Sur por la Colonia Guerrero en la Av. Ricardo Flores Magón, que anteriormente se conocía como Calzada Nonoalco;
Al Poniente por la Colonia Atlampa en la Av. de los Insurgentes Norte; y
Al Oriente por la Colonia Morelos en el Paseo de la Reforma.[1]
Su construcción inició en el año de 1964. Fue diseñado y proyectado por el arquitecto Mario Pani Darqui en colaboración con el arquitecto Luis Ramos Cunningham. En la construcción de este conjunto participaron muchos connotados ingenieros. El Instituto de Ingeniería de la UNAM participó en el estudio de las estructuras y de las cimentaciones. Casi todos los edificios se diseñaron utilizando cascarones de concreto invertidos, con una notable economía de costos en cimentación.

lunes, 1 de febrero de 2010

Iglesia de Snta. Sofía Constantinopla!!


Santa Sofía se considera la obra más grande y sagrada de la época Bizantina. Hoy en día esta visitada como museo por numerosos turistas que contemplan maravillados esta gran obra maestra. Aya Sofía fue utilizada como iglesia durante 916 años, desde su construcción en el año 537 hasta el día de la conquista de Estambul en 1453.
Desde esa fecha hasta 1934, durante 481 años, se utilizó como mezquita. Después de pasar una restauración completa por orden de Mustafa Kemal Ataturk, fundador de la republica Turca, en febrero de 1935, fue inaugurada como museo. Aya Sofía tiene una gran importancia en la historia de la arquitectura por ser la primera construcción de base cuadrada de este tamaño que está cubierta por una cúpula central y dos pequeñas semi cúpulas. En nuestros días Santa Sofía es la cuarta iglesia que tiene una área cubierta más grande del mundo después de San Pablo en Londres, San Pedro en Roma y el Duomo en Milán. El nombre de Aya Sofía es uno de los tres títulos dedicados a Dios. Estos tres títulos se describen como: Aya Sofía (sabiduría divina), Aya Irene (Santa Irene) (quietud, paz) y Aya Dinamis (poder sagrado).
Historia de Santa Sofía:

El emperador bizantino Constantino, en el año 360, hizo construir en el centro de la ciudad, en el lugar donde hoy en día se encuentra Santa Sofía, una gran iglesia con el nombre de " Megale Ekklesia". Sobre las ruinas de esta construcción de madera, que se quemó completamente durante un incendio el 20 de junio del 404, fue construida una nueva iglesia más grande y resistente entre los años 404-406 por el arquitecto Rufinos y fue inaugurada para el culto el 10 de octubre del 416. El emperador bizantino Teodosio fue el mecenas de esta segunda iglesia, que constaba de tres naves en forma basílica. Este edificio, del que pueden verse todavía los restos de su base, las escaleras y un friso decorado con relieves de ovejas justo delante del museo, fue prácticamente destruido por los opositores del emperador durante la insurrección de Nika (victoria) que empezó en enero del año 532. El emperador Justiniano, que recuperó su trono después de la insurrección de Nika, entre los años 532-537, mandó construir la iglesia que se visita hoy en día...

Panteón de Gripa o de Roma.


El Panteón de Agripa o Panteón de Roma es un templo circular construido en Roma a comienzos del Imperio romano dedicado a todos los dioses (la palabra panteón significa templo de todos los dioses). En la ciudad se lo conoce popularmente como La Rotonda, de ahí el nombre de la plaza en que se encuentra.
El Panteón de Roma, una de las obras maestras más impresionantes de la arquitectura de todos los tiempos, no tiene tanta fama como el Coliseo o los Foros Romanos, pero verlo por primera vez es tanto o más impactante.
Escondido entre las calles estrechas del barrio de Trevi, cerca de la plaza Navona, aparece de repente, sin avisar. Es un espectro, un edificio que allá por el año 128 d.C. ya estaba plantado ahí, seguramente tan imperturbable como ahora. Impresiona sólo pensar lo que ha visto pasar delante de su pórtico, durante casi mil novecientos años. Lo de espectro no es exageración, se nota su antigüedad, se nota muchísimo, parece como si estuviera ya en tránsito hacia el otro mundo… Su aspecto ténue y fantasmal contrasta fuertemente con los edificios y la vida de su alrededor. Y sin embargo, está prácticamente intacto.
El Panteón fue construido por mandato del cónsul Agripa, yerno del emperador Augusto, en el año 27 a.C. Era un templo dedicado a todos los dioses (pan quiere decir todo y theos, dios). Después de varios incendios, que prácticamente lo arruinaron, fue reconstruido enteramente desde los cimientos por el emperador Adriano entre los años 118 y 128 d.C. Adriano mandó escribir en el frontón del pórtico de la fachada principal la siguiente inscripción:
M.AGRIPPA L:F: COS TERTIVM FECIT
Es uno de los edificios más grandiosos de todo el mundo antiguo, según se reconoce en un inscripción mandada colocar por el papa Urbano VIII que dice “Aedificium toto orbe celeberrimum“. Las proporciones y la estructura del Panteón son representativos de la concepción religiosa de los romanos: la morada de todos los dioses, como su nombre indica, aparece como una síntesis del cielo y de la tierra. Por eso el conjunto tiene una planta circular cerrada por una cúpula. Tanto la altura del espacio interior de la cúpula como el diámetro de la pared circular de la planta es de 43,20 m, lo que la convierte en la mayor cúpula de fábrica de la historia. La cúpula de la Basílica de San Pedro fue construida un poco más pequeña por respeto a ésta.
Las técnicas constructivas romanas han permitido a la cúpula resistir diecinueve siglos sin necesidad de reformas o refuerzos. Si nos imaginamos completa la esfera que se inscribe en la gran sala circular y que determina la bóveda semiesférica, tendríamos representado el globo celeste reposando en el suelo. La esfera que reposa estáticamente en el cilindro, tiene un radio de 21,60 m, correspondiendo al radio del cilindro y de la altura.
De cualquier forma, lo más extraordinario del Panteón es que se trata de la primera construcción de la Antigüedad en la que claramente se pretende crear un caparazón, no preocupándose en extremo de los volúmenes exteriores. La arquitectura griega creaba sus edificios para ser contemplados desde el exterior donde se reunía el pueblo para las celebraciones religiosas. En el Panteón, por el contrario, se crea un espacio interior donde los creyentes romanos adoran a sus dioses aislándose del universo exterior porque el cosmos está bajo su cúpula. Realmente la obra es una perfecta síntesis de armonía e inteligencia constructiva y nunca, hasta el Renacimiento, catorce siglos después, el hombre se había atrevido a realizar una obra tan gigantesca. Miguel Ángel dijo de este edificio que tenía “un diseño angélico y no humano“.
El edificio conserva todavía su pavimento antiguo de mármoles y restos de policromía sobre los relieves del pórtico. En las capillas interiores, donde antaño estaban estatuas de las divinidades adoradas, existen hoy capillas con numerosas obras de arte y entre ellas hay tumbas de ilustres personajes de la historia y del arte romanos, como por ejemplo la de Rafael de Urbino y los reyes Victor Manuel II, su hijo Humberto I y su esposa Margarita.
Aunque el Panteón es un monumento cuyos gastos de conservación corren a cargo del Ministerio de Bienes Culturales de Italia, sigue siendo una iglesia en la que se celebran misas y sobre todo bodas. Si te acercas a ver el Panteón en tu visita a Roma es probable que acabes tan impresionado como tantos otros en el pasado…
“El más bello recuerdo de la antigüedad romana es sin lugar a dudas el Panteón. Este templo ha sufrido tan poco, que aparenta estar igual que en la época de los romanos.” Stendhal.

lunes, 25 de enero de 2010

La cultura etimologicamente:

Daniel Sánchez Porras
Arquitectura de Interiores
UNARTE

Del latín cultus: que significa cultivo.

Del verbo latino colere (del que derivan colonia, colono, colonizar, colonialismo), cuyo supino (forma nominal) es cultum y que significa cultivar. Tiene su origen en la raíz griega kol (col-) que significa originariamente podar (posiblemente la madre de todas las labores de cultivo, tanto vegetal como humano) y que posteriormente se decantó hacia el culto-cultivo de las personas, con el significado, también muy sintomático, de "adular" en el culto destinado a los de más arriba, y de "castigar" en el cultivo de los de más abajo.
Respecto a los derivados de la raíz col- hay que señalar la fidelidad al origen que ha mantenido la palabra colono (que es el que cultiva la tierra, sinónimo de agricultor), frente a la desviación que han sufrido las palabras colonizar y sobre todo colonialismo, que ya nada tiene que ver con el cultivo, sino con la explotación de los cultivadores, actividad ésta última, propia de los conquistadores o dominadores.

Cultura.

Daniel Sánchez Porras
Arquitectura de Interiores
UNARTE
Cultura
Del latin cultus que quiere decir: cultivo.
Cultura: conjunto de todas las formas, los modelos o los patrones, explícitos o implícitos, a través de los cuales una sociedad regula el comportamiento de las personas que la conforman. Como tal incluye costumbres, prácticas, códigos, normas y reglas de la manera de ser, vestimenta, religión, normas de comportamiento y sistemas de creencias. Desde otro punto de vista se puede decir que la cultura es toda la información y habilidades que posee el ser humano.
La cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella discernimos los valores y efectuamos opciones.